La OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos); ha presentado un informe según el cuál España es el segundo país donde las herencias son más altas; de un total de 18 países que han participado en el Estudio. Esto supone una desigualdad económica dentro del país. Dependiendo de la Comunidad Autónoma en la que se reciba dicha herencia, los gastos que supone para el ciudadano varían mucho; llegando incluso a darse casos de tener que rechazar dichas herencias ante la imposibilidad de hacerse cargo de los gastos derivados de ella.

Desarrollo

En Canarias es prácticamente gratis heredar de un familiar, independientemente del importe recibido; mientras que comunidades como Andalucía, Extremadura o la Comunidad Valenciana son las que más gravan sobre dichas herencias.

La cantidad media de las herencias o donaciones es de unos 100.000 euros; un importe alto debido en gran medida al excesivo gasto en vivienda y a los altos precios de la adquisición de la misma. Este informe también indica que aproximadamente un tercio de las familias españolas ha recibido en algún momento una herencia.

La desigualdad se origina porque sólo aquellas familias que puedan asumir los impuestos que acarrea recibir una herencia; tanto por vivir en una comunidad en la que sea más asequible como por tener un mayor nivel adquisitivo; pagarán los impuestos mientras que las familias con menos recursos o que vivan en una comunidad en la que dichos impuestos sean más elevados no podrán asumirlos por lo que rechazarán la herencia. Todo esto se sigue debatiendo en el Congreso; con iniciativas que abogan por eliminar dichos impuestos sobre las sucesiones; pero de momento el debate sigue y los ciudadanos siguen sin tener una solución a un problema que cada vez sufren más familias debido, en gran medida, a que la población española cada vez está más envejecida y se ha producido un movimiento migratorio mayor.